sábado, 27 de diciembre de 2008

Salud Mental nunca fue importante

EL ESTADO PARAGUAYO OCULTA DEFICIENCIAS Y DEJA DE LADO A ENFERMOS
Salud mental nunca fue importante

La salud mental en el Paraguay siempre tuvo severas deficiencias, nunca obtuvo protagonismo por parte de los responsables de la salud pública, y mucho menos
estuvo dentro de las prioridades de los gobiernos. El Hospital Neurosiquiátrico se convierte en un privilegio inaccesible y en algunas situaciones conlleva
a una doble violación de derechos, según informe presentado por la Codehupy.

Más de 300 pacientes están internados en el Hospital Neurosiquiátrico, entre ellos, adolescentes menores de edad.

A raíz de las denuncias de violación de los derechos humanos de los pacientes (mujeres, varones y adolescentes) que sufren algún trastorno mental siguen
siendo víctimas de discriminación, según el informe presentado por la Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy). Las personas con discapacidad
mental viven olvidadas por el Estado, por la sociedad y, principalmente, por el Poder Judicial.

ABC Color accedió a varias de las denuncias sobre el no acceso a un tratamiento digno de la salud mental. En el Hospital Neurosiquiátrico se registran
varias denuncias de violación a las pacientes, y homicidio de enfermos que fueron encontrados en la chacra. En la Fiscalía Barrial Nº 9 tienen en su poder
varias denuncias sin resolver sobre hechos registrados en el Neurosiquiátrico.

A raíz de las publicaciones, se inició una intervención del hospital, por orden del ministro saliente Oscar Martínez, así la directora Nora Gómez fue separada
de su cargo.

El coordinador de la intervención, Dr. César González, dijo que durante el trabajo que vienen realizando en el nosocomio se ha encontrado un ambiente laboral
absolutamente satisfactorio, y que uno de los problemas es que el Estado paraguayo debe cumplir con sus obligaciones de crear mecanismos de unidades de
salud mental.

“El hospital sigue funcionando a contramano de las recomendaciones generales. La Dirección de Salud Mental del Ministerio que es responsable del funcionamiento
de las unidades de salud mental, probablemente no está haciendo un monitoreo o un seguimiento correcto para que pueda fortalecer esa red, ya que se reciben
pacientes que son derivados para internarse en el hospital” , mencionó González.

El interventor cuestionó por qué el Neurosiquiátrico tiene que proveer mensualmente medicamentos para 30 ó 40 pacientes que están en la cárcel de Tacumbú.
“Cómo es posible que el Ministerio de Justicia y Trabajo no pueda tener un rubro para que ellos puedan estar comprando los medicamentos para esa gente”,
enfatizó.

Cinthia López

Segunda nota:
Afirman que con la ayuda estatal será factible una reforma

La Sociedad Paraguaya de Siquiatría, presidida por el Dr. José Brítez Cantero, manifestó que la entidad mantiene una postura favorable y comprometida con
la reforma, y por ello apoyará la implementación de una ley de salud mental que permita contar con un marco jurídico para la atención siquiátrica que contemple
los derechos civiles y humanos de las personas con discapacidad mental.

Dr. José Brítez, presidente de la Sociedad Paraguaya de Siquiatría.

Apoyan la reestructuración de la atención siquiátrica, respaldados en la Declaración de Caracas de 1990, que da énfasis a la atención primaria, de siquiatría
comunitaria y la desmanicomialización. Es decir, la reducción de camas y la sustitución del Hospital Neurosiquiátrico por la atención en los hospitales
generales. Apuestan a promover una atención descentralizada, participativa, integral, continua y preventiva.

Indican que el modelo de atención convencional centrada en un hospital siquiátrico no permite llegar a objetivos. “Creemos que tiene que haber un marco
jurídico que permita el desenvolvimiento de la atención dentro de los criterios técnicos, respetando los derechos humanos y civiles de los enfermos mentales.
Apostamos a la desmanicomialización como modalidad asistencial fundamental, ya que obstaculiza el logro de la asistencia integral de los pacientes”, explicó
Brítez.

Agregó que debe haber una decisión política para poder cambiar y “si el Gobierno no está interesado en hacer la reforma, no se hace; tiene que haber voluntad
política y jurídica con principios éticos y técnicos, que permitan desarrollar y articular la reforma de la atención siquiátrica.

Los integrantes de la sociedad participarán del Foro de Salud Mental, mañana en Coomecipar.

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