domingo, 28 de diciembre de 2008

En el Paraguay no existe una Organización de PCD con discapacidad mental

ABC Digital
Miércoles, 9 de julio
http://www.abc.com.py/articulos.php?pid=431258&fec=2008-07-09&PHPSESSID=7e169e149634f3156ec16f1e2d846c5b

En el país no existe una asociación de discapacidad mental

Julio Fretes, presidente de la Coordinadora Nacional por la Promoción de los Derechos de las Personas con Discapacidad, dijo que en el Paraguay no existe
una asociación u organización de personas con discapacidad mental, como en otros países.

Julio Fretes, de Conaprodis.

Gente que ha pasado por este proceso y que de alguna manera se ha rehabilitado, se llama a sí misma “sobrevivientes de la siquiatría”.

Se encuentra organizada a nivel local y mundial. En nuestro país, las personas que sufren algún trastorno mental son aún más discriminadas y excluidas
de la sociedad, dentro de todas las formas de discapacidad.

Para Fretes, la culpa no es solamente del Estado, que tiene la principal responsabilidad porque debe proveer servicios para que estas personas sean atendidas
con la mayor dignidad, pero también hay que tener en cuenta que la sociedad permanece sin reaccionar.

La rectificación de la Convención de los Derechos Humanos de las personas con discapacidad en Paraguay ya tiene su aprobación en el Senado y en Diputados.
Solo se está esperando que el Poder Ejecutivo promulgue la ley. La Convención de las Naciones Unidas, artículos 16, 17 y 25, habla del enfoque que debe
tener la persona con discapacidad atendiendo dignidad, edad y género.

Fretes señaló que todos los ciudadanos, de alguna manera, saben de la situación en el manicomio, y que los pacientes sufren todo tipo de abusos.

–Nunca se pensó en las personas con discapacidad mental, ya que no existe ninguna asociación u organización.

–Las personas con discapacidad mental, dentro de todas las diferentes formas de discapacidades, son las que están en una situación de más vulnerabilidad,
porque las mismas carecen de alguna manera de su raciocinio y no pueden defenderse, hablar por sí mismas y lo que es peor todavía, hay una actitud cultural
de la sociedad hacia ese sector mucho más estigmatizante y discriminativa. Dentro de sus familias son discriminadas, nadie quiere tener dentro de su casa
a un loco o una loca. Son abandonados y ante la falta de respuestas de un sistema de salud mental, el Estado no tiene cómo responder ante esta situación,
y lo único que se le ocurre es guardarlos, mantenerlos encerrados en depósito. Ahí todavía empeora más su situación y son sometidos a tratamientos en contra
de su voluntad.

–El acceso a la salud mental sigue ausente para el sector más pobre.

–El problema es que hay un gran sector de la población que no está recibiendo absolutamente ningún tipo de atención a la salud mental. Existe un problema
de un grupo de personas que están internadas y desarraigadas en el Neurosiquiátrico, sufriendo todo tipo de violación a sus derechos humanos, pero hay
un problema enorme de mujeres, niños, hombres y ancianos que tienen trastornos mentales y que no reciben ninguna atención a la salud mental.

–Continúan violando los derechos humanos de las personas.

–No hay que olvidar que el Estado paraguayo fue objeto de una medida cautelar por parte de una Comisión Internacional de los Derechos Humanos y que esa
medida cautelar se levantó porque el Estado paraguayo se comprometió a realizar una serie de acciones para superar, pero lamentablemente no solo no ha
cumplido con su parte del compromiso, sino que ha seguido violando sistemáticamente los derechos humanos de las personas internadas en el hospital, o los
que recurren para algún tipo de tratamiento. Esta problemática ayuda a visibilizar para que las autoridades reaccionen.

–¿Locura y pobreza significan más vulnerabilidad?

–En nuestro país hay una extrema pobreza y miseria, sabemos que el hambre y la desnutrición en una mujer traen al mundo hijos con deficiencias, que después
de alguna manera se van agravando, hay muchas personas que tienen un severo problema sicosocial y no están en el Neurosiquiátrico. No se trata de que todos
deberían estar en el hospital, sino que parte de una base que tiene que ser una institución en que los pacientes acudan en forma solamente temporal. No
deberían ser internados los pacientes con discapacidad sicosocial, tienen que recibir un tratamiento ambulatorio.

HERRAMIENTAS

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